No sé que ha sido peor, la resaca o reeditar las 126 entradas de este blog, algunas de ellas hasta cinco veces (y sin que quedara bien, mecagoentó). O el misterio de los enlaces que cambian de color, los tamaños bailones de las letras y las malas relaciones Explorer/Mozilla, que más parecen Montescos y Capuletos, cada uno empeñado en mostrar mi blog como le da la real gana.
Esta noche soñaré con Verdenas y Georgias.
Hay cosas peores. Doy fe.
Foto: Absint, de Ruzova