Da mi basia mille...




Vivamos, Lesbia mía y amémonos,
hagamos caso omiso a todas las habladurías
de los ancianos en exceso escrupulosos.
Los astros pueden ocultarse y reaparecer,
pero nosotros, cuando se extinga
la tenue luz de nuestras vidas,
dormiremos una noche eterna.
Dame mil besos y después cien,
otros mil luego, y luego cien más.
Empieza de nuevo hasta llegar a otros mil y a otros cien.
Después, cuando hayamos acumulado muchos miles,
los revolveremos todos para perder la cuenta
o para que ningún malvado envidioso
sea capaz de embrujarnos cuando sepa
que nos hemos dado tantos besos.

Cátulo 

Hoy estoy cariñosona, qué le vamos a hacer.









Lo más visto

Copyright © 2012 Fundida en NegroTemplate by: Urangkurai.Powered by Blogger.